Quinto Aniversario AIEC Iluminado por la Esperanza
La Alianza Interreligiosa y Espiritual por el Clima Celebra su Trayectoria
Santiago de Chile, 25 de julio de 2024 – En un ambiente impregnado de solemnidad y esperanza, la Alianza Interreligiosa y Espiritual por el Clima (AIEC) conmemoró su quinto aniversario de existencia, marcando un hito en su incansable labor por la protección del medio ambiente desde una perspectiva espiritual.
La celebración, realizada el pasado 19 de julio en la sede del movimiento espiritual Brahma Kumaris, reunió a un amplio espectro de líderes religiosos, representantes de la sociedad civil y autoridades gubernamentales, todos ellos unidos por un profundo compromiso con la sanación de nuestro planeta.
Un Llamado a la Unidad desde la Diversidad:
Bajo el lema «En nuestra diversidad pertenecemos a la Tierra», la AIEC encendió el fuego como símbolo de la inspiración y la energía que ha impulsado su trabajo durante estos cinco años. Este elemento, presente en diversas culturas y tradiciones espirituales, sirvió como punto de partida para reflexionar sobre la necesidad de unir fuerzas en la lucha contra la crisis climática.
En este sentido, el subsecretario del Ministerio de Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, destacó la relevancia de la misión de la AIEC: «Es de gran necesidad su trabajo en unidad, ya que como dijo el presidente Boric: en el tema de la crisis ecológica nos hundimos cada uno por separado o nos salvamos juntos», afirmó.
Un Legado de Acciones y Compromisos:
A lo largo de su trayectoria, la AIEC ha desarrollado un conjunto de iniciativas significativas, incluyendo:
- Ceremonias de envío en la Moneda de las delegaciones que asisten a las conferencias del clima.
- Establecimiento de nexos con el Ministerio de Medio Ambiente para fomentar la educación ambiental en comunidades de fe.
- Creación de espacios de diálogo y reflexión sobre la relación entre fe y ecología.
- Fortalecimiento de lazos con redes in
Un Futuro Brillante Lleno de Esperanza:
El quinto aniversario de la AIEC no solo es una ocasión para celebrar los logros alcanzados, sino también para renovar el compromiso con la defensa del planeta. En un ritual emotivo, los participantes escribieron sus buenos deseos en llamas de cartón, formando un colorido círculo alrededor del fuego, símbolo de la esperanza que ilumina el camino hacia un futuro más sostenible.
La AIEC, con su enfoque interreligioso y espiritual, representa una voz poderosa en la lucha contra la crisis climática. Su labor inspiradora nos recuerda que la unidad en la diversidad es clave para construir un mundo más justo y armónico, donde la Tierra y sus habitantes puedan prosperar.